viernes, 3 de septiembre de 2010

Janis Joplin tendría una autoestima más alta si hubiera conocido a Amy Winehouse

Siempre he pensado que hablar de rock (y sus derivaciones) es tener presente dos cuestiones elementales sin las cuales no pordría entenderse: el blues y la "actitud rebelde" de la juventud.
La primera es porque inicialemente, o en esencia, el rock (el verdadero rock) parte del blues; de aquellos ritmos escuchados por las clases bajas, y en particular por los negros, en Estados Unidos, el cual se fue mezclando posteriormente con otros géneros como el gospel, el jazz, el R&B, el country y el folk entre otros. Pero no voy a hablar de ello ahora, en lo que me voy a avocar es en aquel segundo, y por qué no decirlo, pretencioso aspecto: la "actitud rebelde de la juventud".
El rock es para todas las edades, de eso no hay duda. Sin embargo, su sonido más característico, el agudo, estridente, irreverente, bullicioso, llamativo, explosivo... se corresponde más con aquella etapa de la vida que se encuentra entre la infancia y la edad adulta.

3 comentarios:

  1. Este era un artículo más extenso pero no sé por qué no se publicó completo. Tengo que volver a escribirlo :(

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  2. Manda tu blog a rehab. . . aunque te diga: No no no!
    Saludos!

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  3. Jeje si verdad, puras fallas!
    pero ya prontito lo termino :)

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